viernes, 6 de diciembre de 2019

Perdón.


Y me destroza el alma y el corazón, y siento que me pierdo y no puedo más
Pero hay algo en mi interior que aunque esta roto no me deja parar, es una sensación desesperante y además no sé qué será, ¿amor?, ¿frustración?, ¿ganas de luchar?, ¿costumbre?. No sé.
Pero la simple idea de dejarte ir, mi amor, quema, duele como el fuego quemandome desde adentro, el saber que te he lastimado se siente como un flechazo en el corazón y no de amor, al contrario, como el flechazo que derrama sangre y esperanza por doquier.
¿Y sabes? Lamento estar en este momento, porque te he lastimado, he roto lo que más he cuidado y guardado de no hacerle daño, pareciera como si cada daga que atraviesa mi alma también atravesará eso que juntos algún día construimos y que costó tanto.
Pero a veces pienso que el amor se construye con seguridad y quiero confesar que esa aún no la he recuperado del todo desde la última vez, mi forma de actuar es diferente, trato de actuar, lo hago mal, me quedo quita, pienso, pienso, pienso, calló, pienso, pienso, pienso, ¿esos pensamientos llevan a algún lado? Lamentablemente no, ¿sor vieron de algo? No, ¿vas a intentarlo nuevamente? Sí. Intento, fallo nuevamente, pienso, pienso... Y así se me VA LA VIDA, siento que se escurren entre mis manos.
¿Cómo es posible lastimar así? Ni yo lo sé.
Perdón, perdón y perdón. Perdón por fallar tanto, perdón por hacer que creas esas cosas, perdón por no poder reparar, perdón por intentar, y perdón por seguir acá intentando otra vez sabiendo que esto puede hacer doler más. Pero no sé pierde nada con intentar, ni la seguridad.

viernes, 5 de julio de 2019

Quédate.

No quería pronunciar esas palabras, creo que no se lo había pedido a nadie nunca, excepto cuando estaba en la cama de hospital y le decía a mamá que se quedara, que no soportaba el dolor y que me diera su mano para poder llorar y sentir que alguien me acompañaba. Lo pensé una y otra vez, porque no quería que te fueras, quería sentir tu calor y que tomaras mi mano, cuando me decidí, solté las palabras y vi tu mirada, sabía que había cometido un error, tú no querías quedarte, sentías que ya me habías dado tiempo y no lo aproveché en lo absoluto.
Tu "no" me caló en el alma, me sentí estúpida, lo único que hice fue asentir y dejar que mi corazón se estrujara un poco más de lo que estaba. ni siquiera pude besar tus labios por la vergüenza, no recuerdo muy bien cómo nos despedimos, solo sé que cuando estuve en un lugar en el que no podías verme me derrumbe en el piso y pedí al universo que no dejara que todo esto acabara.